Venga a este tranquilo pueblo a relajarse del estrés de la vida cotidiana. En este espacioso alojamiento se sentirá como en casa. Las dos terrazas, a las que puede acceder desde los dormitorios, le ofrecen mucho espacio para disfrutar del aire fresco y recibir el día con una taza de café. Escuche el canto de los pájaros y disfrute de la vista del lago cercano.
El lugar es un punto de partida ideal para explorar los alrededores. En Wolin, recomendamos visitar el Museo Eslavo y Vikingo al aire libre. En Midzyzdroje, en cambio, merece la pena visitar el Museo de Cera, el Planetario, el Parque Báltico de Miniaturas o la Avenida de las Estrellas. También puede disfrutar de largos paseos por la playa o el paseo marítimo cercano y dejar que el viento le despeine. También se pueden hacer largas excursiones a pie o en bicicleta de montaña.
Seguro que volverá de estas vacaciones profundamente relajado.