Con sus paredes de piedra natural y sus cálidos elementos de madera, Villa Valente desprende un ambiente acogedor y mediterráneo. Aquí podréis disfrutar juntos del desayuno en la gran mesa de comedor con vistas a las montañas o sentaros juntos a la luz de las velas por la noche. El acogedor sofá es un lugar maravilloso para relajarse, leer o ver una película. La escalera abierta y las habitaciones inundadas de luz crean una sensación de espacio y ligereza, ideal para sentirse completamente a gusto.
Disfrute de la maravillosa vista de las colinas circundantes y del mar desde la terraza y relájese en paz y tranquilidad. Comience el día desayunando al aire libre o termínelo con una copa de vino y un buen libro. Podrá soñar despierto en las cómodas tumbonas mientras una ligera brisa marina le proporciona un agradable frescor. Pase aquí sus días en armoniosa tranquilidad, acompañado por el aroma de las plantas mediterráneas y la vista del vasto paisaje.
Haga una corta excursión a la playa de Jelsa, en la isla de Hvar, y disfrute del agua cristalina y del encantador paseo del puerto. Explore el pintoresco casco antiguo de Jelsa, con sus sinuosas callejuelas, acogedores cafés y casas de piedra dálmatas. Visite las excelentes bodegas de los alrededores de Jelsa para una cata de vinos, pruebe los aceites de oliva locales y descubra calas escondidas rodeadas de naturaleza mediterránea.


















