Disfrute de unas vacaciones cerca de la naturaleza, con mucha intimidad y maravillosas vistas al mar.
Pase unos días relajantes en esta tranquila casa de vacaciones. La casa se encuentra en una amplia parcela y le ofrece total privacidad. El interior de la casa está amueblado con encanto, con un acogedor sofá, detalles de color y un rústico techo de madera. Cocine en la cocina americana con horno de piedra tradicional y disfrute de sus comidas en la gran mesa de comedor. Termine el día en el salón, leyendo un buen libro o entablando una estimulante conversación.
En el exterior, le espera un jardín de estilo mediterráneo con zonas de patio, tumbonas y una zona de comedor cubierta. Relájese en una silla colgante, disfrute de las vistas al mar cristalino y escuche los sonidos de la naturaleza. El paisaje circundante con olivos y muros de piedra ofrece un ambiente idílico para pasar horas tranquilas.
La cercana bahía con su playa rocosa está a poca distancia, y el principal paseo marítimo de hormigón de la ciudad se encuentra a unos 1.100 metros. Explore las numerosas playas de la isla de Dugi Otok, incluida la famosa playa de Sakarun, de aguas turquesas. Los restaurantes locales ofrecen delicias culinarias de la fresca cocina dálmata. Y si le apetece salir por la noche, en el pueblo de Sali hay un popular club para veladas con ambiente.
Pase unos días relajantes en esta tranquila casa de vacaciones. La casa se encuentra en una amplia parcela y le ofrece total privacidad. El interior de la casa está amueblado con encanto, con un acogedor sofá, detalles de color y un rústico techo de madera. Cocine en la cocina americana con horno de piedra tradicional y disfrute de sus comidas en la gran mesa de comedor. Termine el día en el salón, leyendo un buen libro o entablando una estimulante conversación.
En el exterior, le espera un jardín de estilo mediterráneo con zonas de patio, tumbonas y una zona de comedor cubierta. Relájese en una silla colgante, disfrute de las vistas al mar cristalino y escuche los sonidos de la naturaleza. El paisaje circundante con olivos y muros de piedra ofrece un ambiente idílico para pasar horas tranquilas.
La cercana bahía con su playa rocosa está a poca distancia, y el principal paseo marítimo de hormigón de la ciudad se encuentra a unos 1.100 metros. Explore las numerosas playas de la isla de Dugi Otok, incluida la famosa playa de Sakarun, de aguas turquesas. Los restaurantes locales ofrecen delicias culinarias de la fresca cocina dálmata. Y si le apetece salir por la noche, en el pueblo de Sali hay un popular club para veladas con ambiente.
