Este acogedor alojamiento ofrece todo lo necesario para un descanso sin preocupaciones. Un luminoso salón con aspecto de madera, una cocina compacta y un televisor crean el ambiente ideal para desconectar. Siéntese con su lectura de vacaciones o prepare tranquilamente una comida fresca.
Comience el día en el balcón con una aromática taza de café y disfrute de las vistas al agua y a la verde orilla. Tanto si se trata de una tranquila mañana para dos como de los primeros planes para nuevas aventuras, este lugar invita a quedarse. Por la noche, redondee el día con una copa de vino croata en un ambiente acogedor.
Los alrededores de Kruevo le seducirán con tranquilos tramos de costa y amplias vistas de la bahía de Zadar. En el interior, le esperan suaves colinas y naturaleza en estado puro, ideales para extensas excursiones en bicicleta o a pie. A poca distancia en coche se encuentra Zadar, una ciudad llena de historia, sinuosas callejuelas y un ambiente mediterráneo. Disfrute de la velada en una konoba tradicional y redondee el día con una puesta de sol junto al mar.