Disfrute de sus vacaciones familiares en el Kattegat y relájese en esta casa bien equipada donde no le faltará de nada. Pon los pies en alto, prepara un tentempié en la cocina o caliéntate frente a la estufa de leña. Varias terrazas son como pequeños oasis al aire libre donde podrá leer un libro, tomar su café o simplemente disfrutar del sol mientras sus hijos juegan en el jardín.
Unos pocos metros le separan de la playa de guijarros, ya que la casa se encuentra en segunda línea de mar. Báñese en el agua o lance su caña de pescar desde el embarcadero. Podrá recoger conchas o volar cometas con sus hijos. Si te apetece hacer una excursión, no estás lejos de Røsnøs, por ejemplo, que ofrece magníficos paisajes y vistas de la costa. Las islas de Nekselø o Sejerø también merecen una excursión de un día y se puede llegar a ellas en ferry desde Havnsø. A pocos kilómetros se encuentra la ciudad medieval de Kalundborg, con sus calles empedradas, sus casas con entramado de madera, sus buenas tiendas y su singular iglesia de cinco torres.