Esta encantadora casa de piedra del siglo XIX le da la bienvenida a un lugar tranquilo con un ambiente sencillo y acogedor, ideal para relajarse después de un día de turismo o senderismo. Prepare deliciosas comidas con productos locales, sumérjase en un apasionante libro en el sofá o juegue a un juego de mesa.
Sus hijos podrán divertirse explorando la naturaleza en los amplios terrenos vallados. Saluda al suave sol de la mañana con un desayuno al aire libre y empápate del tranquilo ambiente con un vaso de sidra por la noche.
Aproveche su ubicación ideal para explorar Normandía, Bretaña y el Mont-Saint-Michel.
Visite el famoso Mont-Saint-Michel y pasee por las callejuelas hasta la abadía. Recorra en bicicleta la Voie Verte, una línea de ferrocarril en desuso, y disfrute de un día en las playas de arena de Carolles o Jullouville. Explore Avranches, con su interesante museo de manuscritos medievales, y deguste las especialidades regionales en los coloridos mercados semanales.