Este encantador piso es perfecto para una escapada relajante y despreocupada de la vida cotidiana. Las ventanas del suelo al techo permiten que la luz del día inunde el interior mientras disfruta de las hermosas vistas. Siéntese con una taza de café, relájese con su música favorita u organice un pequeño duelo de cocina para dos.
Disfrute de una maravillosa vista del mar desde el balcón y sienta la fresca brisa que sopla desde el Atlántico. Tome aquí un copioso desayuno y relájese por completo. Para un chapuzón refrescante entre horas, salta a la gran piscina, que compartes con otros, y date un baño tranquilamente.
La playa está a tiro de piedra, ideal para nadar y escuchar las olas de Saint-Guénolé, en el sur de Finistère. Realice paseos o excursiones por la costa salvaje y descubra la fascinante naturaleza de Bretaña. A sólo dos kilómetros se encuentra la Pointe de la Torche, un famoso punto de surf donde podrá experimentar de cerca la impresionante fuerza del mar. Otro punto destacado es el majestuoso faro de Eckmühl, que con sus 60 metros es uno de los más altos de Europa y ofrece una impresionante vista panorámica de la costa.






















