La ubicación de la casa no podría ser mejor, ya que nada más llegar le encantará su emplazamiento en una parcela natural con árboles altos y acceso a la duna de arena a través de la terraza. En el interior, las habitaciones se distribuyen en dos plantas que, con su mobiliario y equipamiento luminosos y confortables, crean el marco perfecto para su descanso y sus vacaciones cotidianas. El techo alto y las ventanas panorámicas del salón combinan la vida en el interior con la relajación al aire libre. Elija su terraza favorita o contemple a sus pequeños jugar en las dunas.
El paseo diario por la duna hasta el agua formará parte de su rutina diaria tanto como comer juntos. Salta desde el puente de baño al agua del fiordo o lanza aquí tu caña de pescar al atardecer. Con un poco de suerte y habilidad, puede que pesque la cena para su familia. Para excursiones de un día, recomendamos la ciudad de Vejle, con sus acogedoras calles, varios museos y buenos restaurantes, o la histórica ciudad de Fredericia, con su entramado de calles cuadradas y su idílica ubicación en el Pequeño Belt. Parques de aventuras como el zoo de Givskud o Legoland también están a poca distancia.
¡Pase unas vacaciones inolvidables en esta gran casa en una ubicación especial!