Esta preciosa casa de madera con un pabellón de cristal muy especial en el jardín le da la bienvenida a la Riviera danesa.
Esta casa de buen gusto, amueblada con gran atención al detalle, le da la bienvenida entre Dronningmølle y Hornbæk, a sólo unos cientos de metros de una hermosa playa de arena. La casa está equipada con todo lo necesario para relajarse, y con una sauna le ofrece incluso ese pequeño extra para disfrutar plenamente de su bienestar en vacaciones. Si busca un poco más de intimidad, le gustará saber que el anexo alberga una habitación individual. El anexo está situado cerca de la casa principal. Para que pueda disfrutar de su tiempo en el jardín haga el tiempo que haga, hay un precioso pabellón acristalado para veladas acogedoras.
Al llegar a las afueras de Dronningmølle y Hornbæk, se puede pasear por la playa, darse un baño y dejar vagar la mirada por el ancho mar. También puede visitar el Museo Rudolph Tegners, en una gran duna encenagada, o el museo de arte Munkeruphus, con su hermoso jardín justo en la playa.
Se pueden hacer excursiones de un día a Helsingør, con su castillo de Kronborg y sus numerosos museos, o recorrer en bicicleta la hermosa costa del Mar del Norte, una de las más bellas del país.
Disfrute de sus vacaciones y vuelva a casa con muchas impresiones maravillosas.
Esta casa de buen gusto, amueblada con gran atención al detalle, le da la bienvenida entre Dronningmølle y Hornbæk, a sólo unos cientos de metros de una hermosa playa de arena. La casa está equipada con todo lo necesario para relajarse, y con una sauna le ofrece incluso ese pequeño extra para disfrutar plenamente de su bienestar en vacaciones. Si busca un poco más de intimidad, le gustará saber que el anexo alberga una habitación individual. El anexo está situado cerca de la casa principal. Para que pueda disfrutar de su tiempo en el jardín haga el tiempo que haga, hay un precioso pabellón acristalado para veladas acogedoras.
Al llegar a las afueras de Dronningmølle y Hornbæk, se puede pasear por la playa, darse un baño y dejar vagar la mirada por el ancho mar. También puede visitar el Museo Rudolph Tegners, en una gran duna encenagada, o el museo de arte Munkeruphus, con su hermoso jardín justo en la playa.
Se pueden hacer excursiones de un día a Helsingør, con su castillo de Kronborg y sus numerosos museos, o recorrer en bicicleta la hermosa costa del Mar del Norte, una de las más bellas del país.
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